“Cuando [Jesús] tomó el pan y lo partió, y tomó la copa y la bendijo, estaba presentándose a Sí mismo como el Cordero de Dios que proporcionaría alimento espiritual y salvación eterna”
De la vida de Howard W. Hunter
La Pascua judía manifiesta que la muerte no tiene poder permanente sobre nosotros
- Repase las enseñanzas del presidente Hunter sobre la Pascua judía en el Israel de la antigüedad (véase la sección 1). ¿Qué podemos aprender de la Pascua judía? ¿Cómo se relaciona la Pascua judía con la observancia de la Pascua de Resurrección?
Para comenzar la lección, pida a los alumnos que traten de enumerar de memoria las diez plagas que cayeron sobre Egipto (véase Éxodo 7–11). Luego invite a un alumno a leer Éxodo 11:5–6 en voz alta, y pida a la clase que siga la lectura en silencio para conocer la descripción que ofrece Jehová de la calamidad que resultaría como consecuencia de la décima plaga.
Explique que Jehová dio instrucciones muy específicas que debían seguir los israelitas a fin de escapar de esa plaga. Si los israelitas obedecían esas instrucciones, Jehová “[haría] diferencia entre los egipcios y los israelitas” (Éxodo 11:7) y protegería a sus primogénitos.
Invite a los alumnos a leer Éxodo 12:3–14 en silencio o en voz baja con un compañero para buscar las instrucciones específicas que ayudarían a las familias israelitas a escapar de la plaga. Podría pedir a los alumnos que marquen lo que encuentren.
- ¿Qué mandó Jehová que hicieran los israelitas? (Conforme los alumnos describan lo que leyeron, enumere en la pizarra las siguientes cosas: cordero, sangre, hierbas amargas y pan sin levadura.)
Pascua
Cordero (Jesucristo)
Sangre (la expiación de Jesucristo)
Hierbas amargas (servidumbre, pecado)
Pan sin levadura (arrepentimiento, eliminación del pecado)
- De acuerdo con el versículo 11 , ¿qué nombre le puso Jehová a la cena que debían comer los israelitas? (Escriba Pascua en la pizarra arriba de las cosas que enumeró.)
- Según los versículos 12–13, ¿por qué se le llamó Pascua?
Explique que los alimentos de la cena de Pascua y la forma en que los israelitas debían comerlos eran simbólicos. Ese simbolismo enseñó a los israelitas acerca de la mano de Jehová en su liberación.
Para ayudar a los alumnos a analizar y entender esos símbolos, podría comenzar por invitarlos a comer o a imaginarse algunas de las hierbas amargas.
- ¿Qué aspecto de la vida de los israelitas había sido amargo? (A medida que los alumnos respondan esas preguntas, tal vez desee señalar que cuando los israelitas comieran las hierbas amargas, debían recordar su servidumbre bajo los egipcios. Escriba servidumbre junto a “hierbas amargas” en la pizarra.)
- ¿Qué otra cosa pudieron haber simbolizado las hierbas amargas en la vida espiritual de los israelitas? (Las hierbas amargas son como los efectos del pecado.)
Invite a los alumnos a recordar, mientras comen las hierbas amargas, ocasiones en las que hayan sentido la amargura de sus pecados. Explique que el pecado nos coloca en amarga servidumbre o cautiverio, sin poder regresar a la presencia de Dios. Escriba pecado junto a “hierbas amargas” en la pizarra.
Señale la frase “pan sin levadura” en la pizarra. Pregunte a los alumnos si pueden explicar lo que es la levadura. (La levadura causa que se levante el pan; también causa que el pan se eche a perder y tenga moho.) Explique que la levadura puede simbolizar la corrupción y el pecado. Pida a un alumno que lea en voz alta Éxodo 12:15, y a la clase que siga la lectura en silencio para saber lo que los israelitas debían hacer con cualquier levadura que hubiera en su hogar. Dígales que den un informe de lo que encuentren.
- ¿Qué piensan que podría simbolizar el eliminar toda la levadura que hubiera en la casa y comer sólo pan sin levadura? (Conforme los alumnos vayan respondiendo, escriba en la pizarra arrepentimiento o eliminación del pecado, junto a “pan sin levadura”.)
Invítelos a comer pan sin levadura o a imaginárselo. Pídales que se fijen en lo que empieza a ocurrir con el sabor amargo de las hierbas. (Quizás tenga que señalar que el pan elimina el sabor amargo de la boca.)
Haga referencia a la palabra cordero que está en la pizarra. Invite a los alumnos a estudiar en silencio el versículo 5 para averiguar la descripción de Jehová del cordero que cada familia debía sacrificar. Después pida que un alumno lea Éxodo 12:46, y pida a la clase que se fije en una instrucción adicional respecto a los huesos del cordero.
- ¿Qué creen que pudiera simbolizar el cordero? (Conforme los alumnos vayan respondiendo, escriba Jesucristo junto a “cordero” en la pizarra.)
Invite a los alumnos a comer o a imaginarse algún tipo de carne y a pensar en el sacrificio de Jesucristo para liberarnos de nuestros pecados.
Invite a un alumno a leer en voz alta Éxodo 12:21–23, y pida a la clase que siga la lectura en silencio para determinar lo que Jehová haría por las familias que pusieran la sangre del cordero alrededor de su puerta. Señale que el sacrificio del cordero por sí solo no los protegía del ángel destructor. Sólo los que hubieran marcado debidamente su puerta con la sangre del cordero tenían la promesa de protección.
- ¿De qué tipo de muerte se salvó Israel la noche de la primera Pascua? (La muerte física.)
- ¿De qué tipo de muerte necesitamos todos ser salvos? (Muerte física y muerte espiritual.)
- ¿Qué creen que represente la sangre del cordero que salvó a Israel de la muerte? (Conforme los alumnos vayan respondiendo, recalque el hecho de que la expiación de Jesucristo fue un sacrificio de sangre por el pecado. Escriba en la pizarra expiación de Jesucristo junto a “sangre”.)
- Al igual que los israelitas, que fueron protegidos de la muerte física al poner sangre del cordero alrededor de su puerta, ¿cómo podemos nosotros ser liberados de la muerte espiritual? (Los alumnos pueden usar otras palabras, pero deben poder determinar una declaración doctrinal semejante a la siguiente: Podemos ser liberados de la muerte espiritual mediante la sangre expiatoria de Jesucristo.)
Invite a un alumno a leer en voz alta Éxodo 12:28, y pida a la clase que siga la lectura en silencio y que busque una frase que resuma cómo los hijos de Israel se hicieron merecedores de la liberación. Pida a los alumnos que den un informe de lo que encuentren.
- ¿Qué habría sucedido si los israelitas no hubieran escogido poner sangre alrededor de su puerta como Jehová lo había mandado?
- ¿Qué podemos aprender del ejemplo de los israelitas en cuanto a lo que debemos hacer para aplicar la sangre expiatoria de Jesucristo en nuestra vida? (Los alumnos pueden usar otras palabras, pero deben poder determinar una declaración doctrinal semejante a la siguiente: Podemos aplicar la sangre expiatoria de Jesucristo mediante el arrepentimiento y la obediencia.)
A fin de ayudar a los alumnos a entender la veracidad y la importancia de ese principio, pida a un alumno que lea en voz alta la siguiente declaración del élder Richard G. Scott, del Quórum de los Doce Apóstoles.
“Ese arrepentimiento y esa obediencia son absolutamente esenciales para que la Expiación realice su milagro pleno en ti……
“La Expiación fue un acto generoso de infinitas consecuencias eternas …Mediante ella, el Salvador rompió las ligaduras de la muerte… abre las puertas de la exaltación para todos los que sean merecedores del perdón, por medio del arrepentimiento y de la obediencia” (……“La Expiación puede asegurar tu paz y tu felicidad”, Liahona, noviembre de 2006, pág. 42).
El Salvador instituyó la ordenanza de la Santa Cena durante una festividad que conmemoraba la Pascua judía
- Repase la relación que hace el presidente Hunter de cuando el Salvador instituyó la Santa Cena (véase la sección 2). ¿Por qué ese acontecimiento es importante para usted? ¿En qué formas la Santa Cena es un “convenio de seguridad” para nosotros?
Antes de la clase, prepare una mesa; cúbrala con un mantel y coloque algunas piezas de pan sin levadura (o galletas saladas) y un vaso. Después del devocional, explique que durante el tiempo de Cristo, esos artículos, entre otros, se habrían encontrado en las mesas de los judíos durante la Pascua.
- ¿Cuál es el objetivo de la fiesta de la Pascua? (La fiesta de la Pascua se instituyó en el tiempo de Moisés para recordar a los hijos de Israel que el ángel destructor pasó sobre sus casas y mató a los primogénitos en Egipto [véanse Éxodo 12:21–28; 13:14–15]. Como parte de la Pascua, los israelitas sacrificaban un cordero y esparcían su sangre sobre los marcos de las puertas. El cordero simbolizaba la venida del Mesías, cuyo sacrificio expiatorio salvaría a la humanidad de la muerte y del pecado [véase Guía para el Estudio de las Escrituras, “Pascua”, scriptures.lds.org]).
Participar en la Santa Cena es una oportunidad para examinar nuestra vida y renovar nuestros convenios
- ¿Qué le llama la atención del relato del presidente Hunter sobre la ocasión en que tomó la Santa Cena que está en la sección 3? ¿Qué aprendemos de esa anécdota a fin de hacer más significativa la Santa Cena? ¿De qué modo tomar la Santa Cena es una bendición para usted?

Muestre un espejo y pregunte:
- ¿Cuáles son algunas maneras en las que los espejos nos pueden ser útiles?
Invite a un alumno a leer en voz alta la siguiente declaración del presidente Dieter F. Uchtdorf, de la Primera Presidencia:
“A menudo tratamos de evitar examinar a fondo nuestra alma y afrontar nuestras debilidades, limitaciones y temores…
“Sin embargo, el vernos claramente es esencial para nuestro crecimiento y bienestar espiritual…
“Quisiera sugerir que las Santas Escrituras y los discursos de la conferencia general son un espejo eficaz que podemos usar para examinarnos” (“¿Soy yo, Señor?” Liahona, noviembre de 2014, pág. 58).
- ¿Cómo pueden las Escrituras y los discursos pronunciados en la conferencia general ser como un espejo?
Conforme los alumnos estudien Mateo 26:17–25 invítelos a buscar un principio que pueda ayudarles a reconocer sus debilidades y a esforzarse por vencerlas.
Para resumir Mateo 26:17–19 explique que Jesús les dijo a Sus discípulos que dispusieran de un lugar en Jerusalén para la cena de la Pascua.
Invite a un alumno a leer Mateo 26:20–21en voz alta, y pida a la clase que siga la lectura en silencio para averiguar lo que Jesús les dijo a Sus apóstoles durante la cena de la Pascua.
- ¿Qué le dijo Jesús a Sus apóstoles?
- Si hubieras sido uno de los apóstoles, ¿en que podrías haber estado pensando en ese momento?
Invite a un alumno a leer Mateo 26:22en voz alta, y pida a la clase que siga la lectura en silencio para conocer la respuesta de los apóstoles a la declaración de Jesús.
- ¿Qué pregunta hicieron los apóstoles?
- ¿Qué les enseña la pregunta “¿Soy yo, Señor?” acerca de los once apóstoles fieles?
- De acuerdo con ese relato, ¿qué principio podemos aprender acerca de cómo deben reaccionar los discípulos de Jesucristo cuando oyen las palabras del Señor? (Después de que los alumnos respondan, anote el siguiente principio en la pizarra: Cuando los discípulos de Jesucristo oyen la palabra del Señor, examinan sus propias vidas para ver cómo se aplica a ellos).
Invite a un alumno a leer en voz alta la siguiente declaración del presidente Uchtdorf:
“Los discípulos no dudaron de lo que [Jesús] dijo, ni tampoco miraron a su alrededor para señalar a otro y preguntar: ‘¿Es él?’
“Al contrario, ‘entristecidos en gran manera, comenzó cada uno de ellos a decirle: ¿Soy yo, Señor?’. [Mateo 26:22].
“Me pregunto lo que haríamos… ¿Miraríamos a los demás y diríamos en nuestro corazón: ‘Probablemente está hablando del hermano Johnson. Siempre he dudado de su fidelidad’, o ‘Qué bueno que está aquí el hermano Brown. Realmente necesita escuchar este mensaje’? O, como los discípulos de la antigüedad, examinaríamos nuestro interior y nos haríamos esa pregunta penetrante: ‘¿Soy yo?’ (“¿Soy yo, Señor?” pág. 56).
- ¿Cuáles son algunos ejemplos de cómo podemos ser tentados a ignorar las palabras del Señor y asumir que están dirigidas a alguien más?
Muestre la lámina La Última Cena (Libro de obras de arte del Evangelio, 2009, núm. 54; véase también LDS.org). Informe a los alumnos que mientras el Salvador comía la cena de la Pascua con Sus apóstoles, instituyó la ordenanza de la Santa Cena.
Invite a los alumnos a escribir en sus cuadernos de apuntes o en sus diarios de estudio de las Escrituras sus respuestas a las siguientes preguntas (tal vez desee escribir esas preguntas en la pizarra antes de la clase):
¿Qué estaban haciendo la última vez que participaron de la Santa Cena? ¿En qué estaban pensando? ¿Qué sintieron?
Sostenga el vaso y el pan que se muestran en la mesa. Invite a un alumno a leer Mateo 26:26–29 en voz alta, y pida a la clase que siga la lectura en silencio para determinar lo que el Señor hizo con el pan y el contenido de la copa.
- ¿Qué hizo el Señor con el pan y el contenido de la copa?
- Según esos versículos, ¿qué representan esos emblemas de la Santa Cena? (Los alumnos deben reconocer la siguiente doctrina: Los emblemas de la Santa Cena representan el cuerpo y la sangre de Jesucristo, que Él sacrificó por nosotros).
- ¿Por qué instituyó Jesucristo la Santa Cena? (Después de que los alumnos respondan, anote la siguiente verdad en la pizarra: Jesucristo instituyó la Santa Cena para que nosotros lo recordáramos a Él y recordáramos Su expiación por nuestros pecados).
- ¿Cuáles son algunas cosas que podemos hacer para asegurarnos que la Santa Cena nos ayude a recordar a Jesucristo y Su expiación por nuestros pecados?
- ¿En qué forma el tratar de recordar al Salvador y Su expiación ha influido en sus sentimientos y experiencias al participar de la Santa Cena?
Entregue a cada hermana un librito de «Promesas para Recordar» para meditar durante la Santa Cena.