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Muestre a los niños un vaso transparente con agua. Este vaso de agua representa al mundo. ¡Qué pecados encontramos en el mundo? Algunas respuestas podrían ser fumar, decir malas palabras, mentir, etc. Mientras los niños dan ejemplos, ponga pimienta en el agua.
Los profetas nos han enseñado que debemos estar en el mundo pero no ser parte del mundo. Meta su dedo índice dentro del agua. Vamos a ver como cuando estamos «en el mundo», es muy difícil «no ser del mundo». Quite su dedo y muestre como se pegó la pimienta, es decir, los pecados, a su dedo.
Para protegernos del mundo debemos ponernos «La armadura de Dios». Pida a un niño que sostenga la lámina mientras explica cada una de sus partes (D & C 27:15-18; Ef 6:11-18)
¿Qué cosas podemos hacer para protegernos con esta armadura? Algunas respuestas pueden ser orar, leer las escrituras, tener buenos sentimientos, etc. En este caso el detergente será nuestra armadura. Cubra su dedo de detergente y vuelva a meter el dedo en el vaso. Muestre a la clase como al dedo protegido repele a los pecados y al sacarlo sale limpio.
Pegue en el pizarrón la imagen del niño sin su armadura. Podrán descargar la imagen del niño y la armadura en www.dltk-bible.com. ¿Está este niño protegido del mundo? Para protegerlo vamos a aprender la segunda estrofa de «El Poder de las Escrituras»
Ponga la espada y el escudo en las manos del niño y pegue el cartel junto al niño. La espada y el escudo son elementos que se utilizan para la defensa contra el ataque. Cuando nos están atacando espiritualmente necesitamos lo que se llama «Espada de verdad y escudo de la fe».
Muestre un ejemplar de las escrituras ¿Dónde podemos encontrar la verdad? Pegue el segundo cartel junto al niño. Leer las escrituras nos ayuda a tener una defensa contra los ataques de Satanás, ya que nos ayuda a darnos cuenta cuando Satanás está tratando de engañarnos. Cuando obedecemos las palabras que se encuentran en las Escrituras vemos los buenos resultados y obtenemos fe en las palabras de Dios. Nuestra fe en la palabra de Dios nos protege contra la tentación de hacer algo mal. Canten las dos primeras oraciones todos juntos.
Para que este niño esté completamente protegido debemos ponerle el resto de la armadura. El yelmo de la salvación protege la cabeza: debemos cuidar nuestros pensamientos. La coraza de la rectitud protege el corazón: debemos cuidar nuestros sentimientos. Los lomos ceñidos con la verdad: debemos estar listos para actuar mediante la verdad. Los pies calzados con la preparación del evangelio: debemos establecer metas eternas e ir en esa dirección. Pegue cada parte de la armadura en el niño junto al tercer cartel.
Ahora si el niño está completamente protegido para estar en el mundo! Las escrituras nos protegen y nos dan el poder para para vencer las tentaciones. Pegue el último cartel y canten toda la estrofa junta.
Usadla pues todos los días……….para que resistáis el día malo,,,,