“¿No hay algo profundo en nuestro corazón que añora acercarse más a Dios?… Si es así, el Libro de Mormón nos ayudará a lograrlo más que ningún otro libro”.
El Libro de Mormón es la piedra clave de nuestra religión.
Al leer las enseñanzas del presidente Benson de que el Libro de Mormón es la piedra clave de nuestra religión (véase la sección 1), reflexione sobre el lugar que éste ocupa en su vida. ¿Qué podemos hacer para que el Libro de Mormón ocupe un lugar primordial en nuestros esfuerzos por vivir el Evangelio?
Como clase, construyan o dibujen un arco de piedra (véase Predicad Mi Evangelio, pág. 107). Pida a las hermanas que expliquen por qué José Smith dijo que el Libro de Mormón es la clave de nuestra religión (véase la Introducción al Libro de Mormón).
El Libro de Mormón testifica de Jesucristo y nos acerca más a Dios.
El presidente Benson dijo que el Libro de Mormón testifica de Jesucristo y que nos acerca más a Dios (véase la sección 2). ¿Cuáles son algunas de las cosas que ha aprendido en cuanto al Salvador a medida que ha estudiado el Libro de Mormón? ¿De qué manera el Libro de Mormón los ha acercado a usted y a su familia más a Dios?
Pregunte a las hermanas por qué la frase “Otro testamento de Jesucristo” es un buen subtítulo para el Libro de Mormón. Invítelas a relatar un pasaje del Libro de Mormón que enseñe o testifique de Cristo (como 1 Nefi 10:4–6; Mosíah 3:5–10; 3 Nefi 11:7–11). ¿De qué manera se ha fortalecido el testimonio de ellas con el Libro de Mormón?
El Libro de Mormón enseña doctrina verdadera, contradice las doctrinas falsas y pone al descubierto a los enemigos de Cristo.
¿Por qué debemos “conocer el Libro de Mormón mejor que cualquier otro libro”? ¿De qué forma le han fortalecido las doctrinas del Libro de Mormón contra las “las doctrinas del diablo en nuestra época”? (véase la sección 3).
Ayude a las hermanas a enumerar varias de las verdades que se perdieron o que fueron cambiadas durante la Apostasía, como el concepto de la Trinidad, la manera de bautizar y el Plan de Salvación. Aliente a las hermanas a que busquen pasajes del Libro de Mormón que ayuden a aclarar la verdad (véanse, por ejemplo, 3 Nefi 11:3–11; Moroni 8:4–26; Alma 34:32–35).
Doctrina y Convenios es el eslabón entre el Libro de Mormón y la obra continua de la Restauración.
¿De qué maneras se combinan el Libro de Mormón y Doctrina y Convenios para fortalecernos? (Véase la sección 4).
“La meditación no es absurda”:
“En pequeña escala, aprendí la forma en que todos los santos hombres de Dios llegan a conocer a Dios y al evangelio. No se trata de un don que se da a un pequeño grupo selecto, sino de una bendición que se basa en el principio de la obediencia, las largas horas de dedicación y el estudio.
“Al leer las Escrituras… aprendí algunos detalles esenciales de la meditación y la indagación.
“1. Orar siempre antes de empezar a leer las Escrituras. Es preciso concentrarse y estar libre de todo lo mundano. Además, se debe orar mientras se lee, cuando ciertos conceptos del evangelio iluminan el alma o cuando surgen interrogantes. No debemos vacilar en dirigirnos a nuestro Padre.
“2. Tener siempre a mano lápiz y papel mientras se lee. Esta es una actividad estimulante y muchas veces la mente un poco confusa se llena de buenas ideas, metas y pensamientos interesantes.
“3. ¡Ir despacio! Este estudio no es una carrera. Ya no es necesario terminar una cantidad determinada de capítulos antes de ir a acostarse; se puede pasar varios días estudiando un capítulo o un versículo. Si aprendemos pasajes de memoria, brotarán de éstos significados escondidos que no habíamos reconocido, sentidos que tienen aplicación a nuestra vida actual.
“4. Hacer preguntas mientras se lee… Indagar y después suplicar al Señor. Al hacer preguntas, las puertas de mi corazón se abrieron y dieron entrada al Espíritu Santo para que morara en mí.
“5. Meditar. Durante el día, detenerse varias veces en lo que se esté haciendo y meditar sobre ese concepto que se ha tratado de entender. Por ejemplo, si consideramos la idea ‘Ama a tu prójimo como a ti mismo’, debemos repetirnos mentalmente el pasaje, llevar el pensamiento escrito en un pequeño trozo de papel y evaluar cada una de nuestras acciones de acuerdo con él.
“Para todo esto, es necesario obligarse a dedicarle tiempo; es un acto de renovación diaria. Al renovar así nuestro punto de vista, tenemos la recompensa de ver que nuestra vida sigue una dirección nueva e incluso de recibir revelación diariamente.
“Esa meditación nos lleva a adquirir una comprensión verdadera y más profunda del evangelio, de nuestra misión y de la gloria de Dios. Al reflexionar, muchas veces preparamos el camino para que la dulce paz del Espíritu Santo entre en nuestro corazón y nos ilumine todo el ser con la verdad…
“El presidente Joseph Fielding Smith dijo:
‘Toda mi vida he estudiado y meditado sobre los principios del evangelio y he procurado vivir de acuerdo con las leyes del Señor. Como resultado de ello, mi corazón se ha llenado de un gran amor por El y por Su obra, y también por todos los que tratan de llevar a cabo Sus propósitos en la tierra’ (“Conference Report”, oct. de 1971, pág. 6; cursiva agregada).
“Dedicar tiempo a la meditación. Esto es la clave para recibir gozo y conocimiento increíbles acá en la tierra.
“El Salvador dijo: ‘…Os dejo estas palabras para que las meditéis en vuestro corazón, junto con este mandamiento que os doy, de llamarme mientras estoy cerca.
“ ‘Allegaos a mí, y yo me allegaré a vosotros…’ (D. y C. 88:62–63)” (Susan Hill, “Pondering Isn’t Preposterous”, New Era, mayo de 1976, págs. 49–50).
“Muchos descubren que el mejor momento para estudiar es por la mañana, después de haber descansado a la noche… Otros prefieren los silenciosos momentos después que se ha concluido con el trabajo y los afanes del día… Acaso más importante que el momento del día, sea tener un horario establecido para estudiar con regularidad” (véase Howard W. Hunter, “El estudio de las Escrituras”, Liahona, enero de 1980, pág. 97).
Hacer un plan personal para leer el Libro de Mormón, buscando respuestas a la pregunta: “¿Por qué necesitamos el Libro de Mormón?”. Podrían compartir lo que hayan encontrado en clases futuras.
Gracias!!! Que el Señor las bendiga por esas maravillosas clases del Profeta Ezra Taft Benson… Necesito me ayuden con el capitulo 10 !!! Con ideas…
Mil Gracias =)
Muy bien explicado, me encanto!!!!!!!!!muchas gracias!!!!!!!