Jesucristo dio el ejemplo perfecto de cómo amar y servir a los que le rodeaban. En el bautismo nos comprometemos a prestar servicio a los demás. Podemos servir a los demás como lo hizo el Salvador de muchas maneras, como al ayudar a los miembros de la familia, al compartir el Evangelio con otras personas o al llevar a cabo sencillos actos de bondad cotidianos.
¿Cómo puedo ser más semejante a Cristo en mi servicio a los demás?
¿Qué ha aprendido de las Escrituras acerca de cómo Cristo prestó servicio a los demás? ¿Cuándo ha recibido bendiciones por medio del servicio cristiano de los demás? ¿Cómo ha seguido el ejemplo de servicio del Salvador?
¿Qué oportunidades tienen las jóvenes de prestar servicio? ¿Cuándo las ha visto servir a los demás? ¿Qué experiencias pueden compartir unas con otras? ¿Cómo podrían sus familias verse beneficiadas si las jóvenes procuran servirles más?
– Desafío Servicio Secreto – Desafíe a las jóvenes durante una semana a hacer pequeños actos de servicio a los que las rodean, dejando un corazón de papel en el lugar. Pueden utilizar esta actividad como una meta del Progreso Personal.
– Pida que alguien lea 1 Corintios 13:2–7. Pida a los miembros de la clase que hablen en cuanto a las ideas de este pasaje de las Escrituras ¿Puede una hermana que tenga el verdadero amor de Cristo tener prejuicios contra la gente de otra raza? ¿Puede volver la espalda al enfermo, al pobre o al hambriento? ¿Puede sentir envidia por el éxito de otras personas? ¿Puede chismorrear acerca de los demás o criticarlos? ¿Por qué debemos esforzarnos por obtener la caridad?
– Pida a una hermana que cuente una experiencia que haya tenido al aprender a amar a alguien. ¿En qué forma podemos cultivar una relación más profunda, incluso con los miembros de nuestra propia familia, mediante el servicio?
– El Señor enseñó que “el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará” (Mateo 16:25). ¿Qué tiene que ver eso con el servicio? ¿Qué bendiciones eternas se reciben por prestar servicio abnegado a los demás? ¿Qué diferencia existe entre prestar servicio porque se nos manda o hacerlo porque así lo deseamos? (Véase D. y C. 58:26.)
– ¿Qué experiencias ha tenido usted al dedicarse a servir a otras personas? ¿En qué se relacionan la felicidad y el servicio? El servicio a los demás ¿de qué modo nos ayuda a vencer el egoísmo, la infelicidad o la depresión? ¿Cómo nos libramos de malos sentimientos al servir a las personas hacia quienes los tenemos?
– Buenas Obras, Experiencia 3 del Progreso Personal: Lee Mosíah 18:7–10 y, en tu diario, anota tres formas en que puedas dar consuelo a los demás o ayudarles a llevar sus cargas. Haz las cosas que hayas anotado y relata tu experiencia a un familiar o a un líder y explica la forma en que hayan cambiado tu actitud y tu entendimiento.
– Video: “El abrigo” Una historia verídica acerca del servicio en la niñez del presidente Heber J. Grant.
– Video: Mensajes mormones, “El servicio desinteresado”
– Video: Mensajes mormones para la juventud, “Las piernas de Dayton”
– Video: Relatos del Nuevo Testamento, “Capítulo 35: El buen samaritano”
Esta linda actividad está incluida en 1 año de Mutuales basadas en el Progreso Personal. Te recomiendo que pases a verlo porque hay muchas más ideas que seguro te van a encantar!
Un comentario
Pingback: Jesucristo es el Salvador del mundo | Conexión SUD